Título Original: Eleven Scandals To Start To Win a Duke’s
Heart.
Autora: Sarah
MacLean.
Saga: Amor
por números.
Género: Romántica
histórica
Isbn: 978-84-92929-74-0
Editorial: Versátil
Consíguelo aquí
Sinopsis:
<<La hermana
pequeña de los incorregibles Ralston promete ser el escándalo de la temporada.
Juliana Fiori es un espíritu apasionado. Es impulsiva,
decidida y poco le importa lo que opine el resto de la alta sociedad
londinense, lo que la convierte en el blanco favorito de los cotilleos de la
ciudad. Es nada más y nada menos el tipo
de mujer que el duque Leighton querría tener lo más lejos posible. El duque
tiene una intachable reputación que proteger pero Juliana está dispuesta a
demostrarle que nadie puede resistirse a la pasión, aunque se trate del
mismísimo duque de Leighton, y tiene dos semanas para demostrárselo.>>
Mi opinión:
La portada de este libro es preciosa. Sin lugar a
dudas, la mejor de la trilogía.
Hablemos de la saga: Os la recomiendo fervientemente,
porque si este tercer libro me ha gustado, el primero me encandiló. Sin embargo
tiene un punto flojo: el segundo libro. Admito que es uno de esos pocos libro
que no he podido terminar. Dicen los expertos que el final es bueno, y que vale
la pena leerlo, pero no pude hacerlo. Lo cual me hizo dudar de la autora y
esperar más a leer el tercero, principalmente porque no suele ser muy
recomendable saltarse libros de una trilogía. Pero me arriesgué y ha merecido
la pena. Así pues, que no os reparen las malas críticas de la segunda entrega,
porque pese a eso es una muy buena saga, muy recomendable para los amantes de
la romántica histórica.
Los personajes: Nuestra protagonista, Juliana Fiori,
es una italiana de fuerte carácter, hermana de los Ralston, quienes la
introducirán en Londres donde obviamente, desencajará. Marcada por la imagen de
su madre, lucha con todas sus fuerzas por demostrarse a sí misma, que es muy
distinta a la mujer que le dio la vida. Y que no os quepa duda, porque lo es.
Con su estética muy diferente a la de las mujeres londinenses, sus costumbres
arriesgadas y la pasión, ese elemento que tanto la caracteriza, conseguirá que
el Duque de Leighton caiga rendido a sus pies antes siquiera de que piense en ello
como un propósito personal. Ah Simon… un hombre para el que su título es lo más
importante de su vida. Un hombre para el que salvaguardar la reputación de su
familia es el más importante quehacer de su día a día. Un hombre al más puro
estilo londinense de la época: recto, serio, machista, protector… Alguien
totalmente opuesto a nuestra descarada italiana. Quizás sea por eso que entre
ellos surge la pasión, al fin y al cabo dicen que los polos opuestos se atraen;
o quizás, sólo quizás, mi querido Duque no sea tan inmune a la pasión como él
cree.
Son, sin lugar a dudas, dos protagonistas dignos de serlos.
Con una personalidad muy marcada, y con una historia a sus espaldas.
En lo referente a la trama, es muy fluida. La
historia sucede de manera rápida y acompasada, con todas las escenas bien
ligadas. No hay ningún momento en el que la intriga decaiga y mucho menos en el
que la historia se haga aburrida. La historia de amor te atrapa desde el primer
momento, junto con las intrigas que los rodean a ambos.
Esta historia me ha hecho suspirar, reír y anhelar. Es un
libro fácil de leer y que te atrapa entre sus páginas, trasportándote al
Londres de los bailes y las presentaciones en sociedad.
Otra de las cosas que debo señalar es la presentación de
Georgiana. Una manera muy audaz por parte de la escritora de conseguir que su
siguiente saga: Las Reglas de los Canallas, nos sea imprescindible.
Me ha gustado mucho esta novela, pero si tuviera que
quedarme con uno de la trilogía, no me lo pensaría dos veces: La primera
entrega: “Nueve reglas que romper para conquistar a un granuja”, y es que
Gabriel, nuestro querido duque de Ralston, es inolvidable.
Mi puntuación:
Un saludo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario